En medio de las luchas sociales, las guerras políticas y religiosas y la corrupción que caracterizan el convulso siglo XIX europeo, un personaje que bien podría ser el típico antagonista de cualquier novela emerge como héroe de esta historia que lleva la firma del compositor, músico y escritor sueco Carl-Johan Vallgren. Se trata de una gran cuento de amor de esos que retan los límites físicos y temporales, algo así como nueva versión de "la bella y la bestia" que es, además, un canto a la diferencia, a la tolerancia y a la magia.
"En la poesía egipcia, el amor se simboliza con un curioso jeroglífico triple, compuesto por una azada, una boca y una figura de hombre que se lleva la mano a la boca. Los primeros egiptólogos se preguntaron si el amor de los faraones sería una especie de trabajo que exigía herramientas y la paciencia de un jardinero". *
Es una historia de amor universal. Pero él no se llama Romeo y ella no se llama Julieta. En el fondo, es mucho mejor: cuando hablamos del tópico amoroso de estos dos personajes a veces no pensamos que esta historia de amor apenas duró una semana y dejó demasiados cadáveres a su paso :( Pero eso es otro tema. Volvamos a los personajes que no son ni Romeo ni Julieta. Él se llama Hercule, no tiene brazos y tampoco orejas, y su cuerpo es deforme. Ella tiene la piel blanca y suave, y es muy bella. A él el destino le depara un sinfín de historias, las equivalentes a varias vidas "normales". Es lo que tienen los seres extraordinarios: que pueden viajar por media Europa, de Roma a París, pasando por Berlín, Niza o Copenhague, bien como integrante de una compañía teatral o bien haciendo gala de una capacidad del todo inaudita de tocar el piano con los dedos de los pies. Ella, Henriette, tendrá su vida ligada al oficio de su madre, que heredará por castigo tras su nacimiento en un burdel de una pequeña ciudad prusiana. Ambos están sujetos a una fecha de nacimiento que comparten. También comparten el dolor, que será protagonista de la mayor parte de sus vidas, y la esperanza, dibujada en ambos casos por la ilusión de volver a encontrarse algún día, en esta vida o en cualquier otra.
"En El Banquete de Platón se cuenta el siguiente relato sobre el origen del amor: en el origen de los tiempos no existía ni hombre ni mujer, sino diversos compuestos de ambos. Tenían dos rostros, cuatro brazos, cuatro piernas, cuatro pies y así sucesivamente; estaban unidos por la espalda, por lo que podían caminar hacia delante y hacia detrás. Algunos de estos seres se componían de dos partes masculinas, otros de dos partes femeninas ; y existía un tercer grupo, el más numeroso, mitad hombre y mitad mujer. Estos seres cuadrúpedos, nos cuenta Platón, tenían tal ansia de poder que terminaron por constituir una amenaza para los dioses. De ahí que Zeus resolviese dividirlos para reducir su fuerza. (...) cuando se vieron divididos, fueron presa de la añoranza de la fusión".
El protagonista de esta historia invita a la reflexión. Es uno de esos personajes de ficción extraordinarios, que conmueve por su tragedia humana y a la que debido a ésta cualquier venganza hacia otros, por cruel que sea, le será justificada. Por lo demás, es extremadamente atractivo meterse en la piel de un hombre que es prácticamente un enano, que se pasea por la calle con una máscara y que tiene poderes extrasensoriales, además de ser un virtuoso del piano y del lenguaje de signos "a dos pies". En la otra parte de la novela, la dulce Henriette, una Ofelia cualquiera, frágil, triste, melancólica...demasiado aburrida para algunos gustos.
"En aquellas salas abisales, los muertos dejaban escapar broncos suspiros en latín y los espíritus de los soldados romanos vagaban con la esperanza de hallar la salida".
Más allá de los personajes, más allá de Hercule y Henriette, "Historia de un amor maravilloso" de Carl-Johan Vallgren recorre un periodo apasionante (1813-1838) de una Europa que vive momentos de cambio social y político, avances industriales y tecnológicos que nos llevan hacia un futuro incierto, y, sobre todo, una considerable apertura intelectual. Reflejo de ello, el enfrentamiento entre razón y religión, muy presente en la novel, y entre el progreso y las viejas costumbres del Viejo Continente. El espiritismo como corriente de pensamiento también tiene un hueco en la trama, al igual que hechos puntuales y que nos remiten a cierto oscurantismo aún palpable en el ambiente, como por ejemplo las peleas de animales exóticos (que se viven como combates de boxeo) y los "juicios a bestias" (en los que animales domésticos eran juzgados como si fueran personas, sometidos a las mismas causas y penas). Tramas que tienen a religiosos jesuitas y a exorcistas completan este círculo literario que nos habla un continente lleno de supersticiones y expuesto a demasiados cambios.
*En cursiva, fragmentos originales de la novela
No hay comentarios:
Publicar un comentario